Era el sustituto de Busquets, Tuchel no se lo cree y lo pone en bandeja: el Barça sueña para 2024

Hay lío en el Bayern de Múnich, Thomas Tuchel llegó al conjunto bávaro con la intención de sacudir el árbol en busca de nuevas y mejores soluciones para su equipo. En este sentido, aparece el nombre de Joshua Kimmich, que según el técnico germano tiene condiciones para ser un jugador mucho más ofensivo del que ya es, algo que no ha gustado nada al jugador, que se niega a aceptar la opinión de su técnico y a jugar más adelantado, según la información de Sport Bild.

Kimmich, en conflicto constante con Tuchel

Thomas Tuchel siempre se ha caracterizado por tener un fuerte carácter y no tolerar salidas de tono. En esta línea, Kimmich está jugando con los límites, pues una mala actitud podría romper del todo una relación que está ya tocada y lista para ser hundida.

Según la citada información, el conflicto habría surgido a raíz de la idea de Thomas Tuchel de adelantar la posición de Kimmich y a su vez fichar a un mediocentro defensivo capaz de cubrir el hueco que dejaría el alemán. Ante esta realidad, todo apunta a un choque entre Tuchel y Kimmich, donde el entrenador le habría recriminado que su mal estado de forma estaba lastrando al equipo, haciendo a los bávaros demasiado lentos en la circulación de balón. Algo que no ha gustado ni al jugador ni a la directiva.

Nuevo conflicto, fin de contrato y… ¿opción Barça 2024?

Xavi es un fan declarado de Joshua Kimmich, el alemán es un jugador fetiche del técnico egarense, que ven en él a su Sergio Busquets. Sin embargo, pese a que exista la opción de ficharlo en este mercado, sería imposible hacerlo dada la precaria economía del club. Pero de cara a 2024, con solamente un año restante de contrato, el conflicto sin resolver y con una economía más saneada, podría ser el momento del fichaje definitivo del Barça.

Junto a Rodri, Joshua Kimmich es el jugador más parecido a Sergio Busquets en todo el mundo. El germano cuanta con una inteligencia fuera del alcance de la mayoría de los futbolistas y su capacidad para distribuir desde el pivote es difícilmente igualable. De este modo, si se pusiera a tiro, Laporta haría muy bien de lanzarse a por su contratación, que sería estratégica de cara al futuro.