Cólera en Liverpool y Múnich por Carletto: Florentino y Xabi, acuerdo secreto y exprés previo a 2026

El Real Madrid y el Manchester City, abonados ya ha encontrarse por el título de la Champions (esta temporada está considerada esta eliminatoria como una final anticipada), desplegaron un enorme partido de fútbol del que de nuevo Guardiola salió ileso de un ambiente sensacional en el Bernabéu, a Vinicius, Rodrygo y Bellingham, y otra vez los skyblue son favoritos en la vuelta. Por eso Florentino Pérez se guarda una carta de urgencia para la campaña que viene.

Una renovación con condiciones, así es el Madrid

Son pocos los que dan ya muchas opciones al Madrid en la vuelta en el Etihad Stadium, donde los skyblue no han perdido desde 2018, en tiempo de pandemia y ante el Lyon, y si estos pronósticos se cumplen, al máximo mandatario le empezará a temblar el pulso con un Carlo Ancelotti que tiene contrato hasta 2026 pero con condicionantes, unos que su incapacidad para tumbar a Pep comienza a florecer. Y ahí entran Kylian Mbappé y después Xabi Alonso.

El francés lo hace como el gran fichaje que quizá le falte a este Madrid y que por tanto es la excusa que esta campaña puede argüir el equipo merengue contra el City, es decir, no tener un goleador de talla mundial, pero la que viene, la 24/25, con el de Bondy en el equipo, no puede servir de pretexto este hecho y si vuelve a suceder que Carletto, ya supuestamente con Mbappé en el equipo, falla, Xabi Alonso puede llegar antes de tiempo.

Para ello, claro está, el tolosarra debería poner fin a su etapa en el Bayer Leverkusen en junio de 2025, pero, lejos de lo que pueda pensarse, esto no es descabellado; al fin y al cabo, tras ganar la Bundesliga (virtualmente), acercarse a la copa y estando vivo en la Europa League, pero, sobre todo, llevando al cuadro del BayArena a la Champions, el entrenador vasco solo quiere darse una temporada más de consolidación del proyecto; con ello, tendrá la conciencia tranquila.

Si esto sucediera, si Carlo Ancelotti fuera despedido antes de tiempo para poner al frente a Xabi, en Liverpool y Múnich, que lo querían este verano, sentará como un jarro de agua fría.