Bombazo, Jan Oblak filtra su adiós: Simeone y el Atleti hartan al meta
El Atlético de Madrid está contra las cuerdas en LaLiga y en la Champions, y el guardameta se cansa
Es verdad que los porteros pueden gozar quizá de una mayor longevidad que los futbolistas de campo, al menos de aquellos más explosivos y menos dependientes de su calidad individual, sin embargo en el caso de Jan Oblak la edad y su contexto no le ayudan en su toma de decisiones, ya que es tentado por la Premier League y el Atleti sigue en caída libre; es más, ha dejado entrever que su frustración puede llevarle fuera del club en junio.
El esloveno tiene sobre la mesa casi cheques en blanco de Chelsea o Manchester United y aunque tiene contrato, fuentes cercanas al jugador aseguran que se lo está pensando por primera vez. Y no es un tema exclusivamente relacionado con lo económico. Oblak habitualmente se mueve en un perfil bajo, en un tono comedido, como de héroe sin necesidad de medallas, sin embargo tras la caída ante el Brujas en la Liga de Campeones rajó, algo que, como decimos, es raro en él.
“Es una pena que tengamos que sufrir siempre hasta el último partido, tenemos calidad para más”, dijo tras el partido ante el cuadro belga que les deja casi fuera de los octavos de final de la Champions League (deben ganar los dos partidos que les quedan). Además, LaLiga está muy complicada. Ayer los rojiblancos tuvieron más voluntad que ideas y, sobre todo, solvencia. Incluso sufrieron para sacar el empate que les sirve de poco, y, como dice el meta, lejos de ser la excepción, esta es la dinámica del equipo en los últimos años.
De modo que volvamos a la posibilidad que ya se le abre al Cholo Simeone con Oblak, el jugador ya no se cierra en banda a una venta por lo que el club ha empezado a buscar alternativas, ya que una salida millonaria dejaría beneficios importantes en las arcas, tantas como para afrontar refuerzos de peso. En este sentido, si el Atleti pone el guardameta en el mercado, el United y el Chelsea se lanzarán a por él, pero seguramente no sean los únicos. Ahora bien, la cifra de salida ha de ser verdaderamente mareante. Eso sí, ya no es un ‘no’ rotundo a que salga.