Benzema honra a Florentino y Kevin De Bruyne engrandece a Guardiola
Real Madrid y Manchester City tiene hoy motivos de felicidad
La gala del Balón de Oro se saldó con Karim Benzema como uno de los grandes triunfadores de la noche. El delantero del Real Madrid recibió el galardón que le acredita como el mejor jugador del año 2022 y esto supone una alegría tremenda para el madridismo ya que, aparte de ser el capitán del equipo, ya forma parte de la historia del club gracias a sus goles y, sobre todo, a su extraordinario palmarés.
Sin embargo, es a Florentino Pérez a quien debe mucho ya que el mandatario merengue decidió apostar fuertemente por él en 2009, cuando militaba en Olympique de Lyon y cuando todavía no podía presumir de atesorar una dilatada trayectoria tras sus pasos. Benzema se incorporó al conjunto blanco como un exponente más de un verano mágico en el que Cristiano Ronaldo, Kaká o Xabi Alonso también llegaron al Bernabéu.
Por ello, gracias a la constancia y al talento del francés, Florentino hoy tiene un motivo de suma satisfacción, ya no solo por haber confiado ciegamente en el delantero, sino porque este avala con dicho Balón de Oro la acertada decisión del mandamás cuando formaba parte del cuadro galo.
La cara B, una cara también satisfecha
Es cierto que Benzema se llenó de halagos por ganar este trofeo, pero Kevin De Bruyne y Pep Guardiola también tienen un motivo de alegría. El mediapunta belga fue el tercer futoblista más votado para ganar el Balón de Oro y esto, a pesar de tener a Karim y Sadio Mané por delante, le convierte en historia de los skyblues: es el primer jugador de la entidad que se cuela en el podio de este distinguido evento.
Las prestaciones de De Bruyne hacen justicia a este reconocimiento, siendo a día de hoy uno de los pilares en el City, y esto también engrandece a Guardiola. El entrenador barcelonés no solo fue el impulsor de su aterrizaje en el Etihad Stadium en 2015, sino que ha sabido explotar al máximo sus virtudes y, en consecuencia, convertirlo en uno de los mejores futbolistas del mundo en la actualidad, reforzando así su excelente labor al mando del conjunto inglés.