Abramóvich y Haaland abren al tapado de 86 kilos: plan B de ‘Carletto’

Como os anunciábamos ayer en Don Balón, Roman Abramóvich está dispuesto a llegar hasta la locura absoluta en este mismo mercado de fichajes por Erling Haaland, una cifra estipulada por el Borussia Dortmund en 190 millones de euros. No ha transcendido ni cómo lo harán ni cuánto está dispuesto a subir su oferta el cuadro inglés para acercarse a esa propuesta, pero lo que sí se confirma es que desde Londres van a tratar de fichar al delantero, lo que, a la vez, desde el mismo club germano abre una nueva posibilidad a Carlo Ancelotti y el Real Madrid.

Vayamos por partes. El Chelsea, de manos del magnate Roman Abramóvich, quiere dar el todo por el todo por Haaland porque piensa que nadie más pondrá tanto dinero este verano y sí el siguiente, donde la cláusula liberatoria del jugador puede dar acceso al 9 a muchos equipos; luego, siendo como es ya el escandinavo uno de los tres mejores goleadores de Europa, piensa en la capital de Inglaterra que cualquier inversión por el ariete será amortizada rápidamente, sea esta de la cuantía que sea. Ahora bien, el Dortmund no pensaba quedarse este verano sin el delantero, lo cual cambia sus planes, que pasaban por cumplir exclusivamente con la promesa hecha a su otra estrella, Jadon Sancho, de aceptar ofertas por él.

Y ese en este asunto en el que entra el Real Madrid, que ante la negativa del Paris Saint-Germain a vender este verano a Kylian Mbappé mira en todas las direcciones por un crack. En la casa blanca y a Carletto le gusta Harry Kane, pero también suena prohibitivo, mientras que en la zona noble se está muy atento a los posibles descartes del Manchester City, donde asoma Raheem Sterling. Sin embargo, se han dado cuenta en el Bernabéu que el más sencillo de cuantos cracks mundiales están disponibles también juega en el Dortmund y se llama Jadon Sancho.

El Real Madrid necesita un crack mundial y Haaland y Mbappé se le complican por obra del Chelsea y el PSG, de modo que mira a la estrella más convincente y económica, que en este caso es el extremo inglés, cifrado en un precio de 86 millones de euros. Cierto es que el United tiene las conversaciones muy avanzadas por el jugador del Signal Iduna Park pero el Madrid puede meterse en medio debido a la locura de Roman Abramóvich por el noruego y a la postura inflexible de Nasser Al-Khelaifi por el 10 de Les Bleus. El efecto dominó ha empezado.