Jugó en el PSG antes que Messi y Ramos, el Barça le llamó y su carrera agoniza como pasó con Hazard

Ambos futbolistas fueron muy importantes en la selección belga

Eden Hazard es historia viva de una selección belga de la que se retiró de forma oficial tras la conclusión del Mundial de Qatar, anunciando seis meses después su adiós definitivo al fútbol profesional.

En tal caso, en esa etapa de esplendor del combinado belga también destacó la figura de Thomas Meunier, aunque no al mismo nivel que su compatriota, quien durante mucho tiempo ha estado considerado como uno de mejores laterales derechos del mundo pero que, tras jugar en el PSG y recibir la llamada del FC Barcelona, está viviendo una caída en picado manifiesta por culpa de sus lesiones, como sucedió con Hazard a lo largo de su estancia en el Real Madrid.

Meunier, que actualmente forma parte de las filas del Borussia Dortmund, militó en el PSG antes de que Leo Messi y Sergio Ramos aterrizan en el Parque de los Príncipes y, aunque estuvo cuatro temporadas en el club galo, su rendimiento no fue del todo gratificante, algo que asimismo terminó fulminado sus opciones de seguir formando parte del proyecto en 2020.

En tal caso, en Barcelona se sintieron muy atraídos por la posibilidad de contar con el futbolista belga debido a la ingente cantidad de problemas presenciados en el carril derecho por culpa de Sergi Roberto y Nélson Semedo, problemas a los que João Cancelo puso una solución el verano pasado.

Eso sí, centrando la mirada en Meunier, tras vivir un primer de tramo de temporada muy complicado en Dortmund por culpa de sus recaídas musculares el futbolista de 32 años está en el radar del Feyenoord, club que está dispuesto a hacerse con el carrilero derecho en este mismo mercado invernal aprovechando que el jugador acaba contrato con el coloso alemán el próximo 30 de junio, algo que vaticina un traspaso low-cost entre los clubs por un futbolista que, tras saborear el placer de estar en la agenda de los equipos más laureados de Europa, está a punto de recalar una liga con menor reconocimiento.