Guardiola y Zidane ya saben de qué depende la decisión de David Alaba

El jugador del Bayern de Múnich se marchará de la Bundesliga pero no se sabe si a la Premier League o LaLiga

El cerco se está estrechando pero para desgracia del Real Madrid lo ha hecho sobre varios equipos. No es para menos, el bien es muy preciado. No en vano David Alaba pasa por ser uno de los mejores defensas del mundo, uno que milita en el mejor equipo en estos momentos del planeta. Y lo bueno de todo esto, salvo para el cuadro bávaro, es que la decisión del lateral es firme: se quiere ir en junio y lo hará gratis este verano; falta ver en qué dirección.

En este sentido parece que sobre Paris Saint-Germain, Manchester United, FC Barcelona, Manchester City y Real Madrid se va a decidir por uno de estos dos últimos clubs. No ayuda sin embargo a la causa blanca que el rival por tratar de hacerse con sus servicios sea una entidad con un capital foráneo capaz de ver pasar con relativa calma la crisis económica y sanitaria, como es el caso del cuadro skyblue. Sabe el Madrid que si se trata de dinero tienen todas las de perder.

Y tampoco ayuda el proyecto de Pep Guardiola, que conoce al jugador y asegura un estilo de juego vertical, dominante y preciosista. Visto así, se dirán, ¿qué posibilidades le quedan al Madrid para ser receptor del defensa austríaco? Pues resulta que bastantes, porque el deseo del futbolista, salvo que cambie de aquí al final de temporada (que lo puede hacer, ya que resta mucho tiempo) es jugar en el Madrid, que es algo así como un sueño no cumplido del genial jugador zurdo.

Con todo y más, el Madrid ha de cuadrar cuentas y preparar la salida de una o varias piezas de la defensa (entre ellos Marcelo) para dar entrada a Alaba. Unido a ello, el proyecto que presente el club blanco debe ser lo suficientemente atractivo como para evitar que el centroeuropeo vire el rumbo en su decisión inicial y ponga dirección a la Premier League, una liga, hoy por hoy, mucho más atractiva que la española en cuanto a repercusión, ingresos e incluso estrellas. Así las cosas, ¿pesará para Alaba más el corazón para irse con Zidane o la cabeza para ponerse de nuevo a las órdenes de Guardiola?