Steph Curry y LeBron James se lo temían y el efecto puede ser explosivo con Kings y Grizzlies

El play-off cobra un grado más de emoción con estas novedades

Las sensaciones mostradas por Golden State Warriors y Los Angeles Lakers en estos primeros partidos del play-off son completamente opuestas, pero a Stephen Curry y LeBron James les une algo en común: sus resceptivos rivales tienen armas más que de sobra para enterrar el sueño de ambas franquicias californianas de poder pelear por el anillo.

Y es que en las últimas horas la NBA ha hecho público el nombramiento de Jaren Jackson Jr como Mejor Jugador Defensivo del Año en la liga, teniendo en cuenta -como es evidente- la fase regular. El ala-pívot de los Grizzlies ya firmó una gran actuación en el primer partido de la serie ante los Lakers (31 puntos anotados) a pesar de la derrota de su equipo. Por ende, este choque de autoestima podría conllevar consecuencias muy importantes en los encuentros venideros y esta misma noche LeBron, Anthony Davis y el resto de sus compañeros podrían comenzar a sufrir los efectos más nocivos para sus aspiraciones.

El caso de los Warriors conlleva varios escalones más de gravedad. Aunque Stephen Curry, la estrella del equipo, ha firmado actuaciones muy reseñables en la eliminatoria ante Sacramento Kings, los de Steve Kerr han perdido los dos primeros encuentros y, aunque ahora la serie se traslada a San Francisco, el conjunto morado viaja con una noticia muy importante entre manos… especialmente para su jugador más diferencial, con permiso de Domantas Sabonis: De´Aaron Fox.

Si Jaren Jackson Jr ha sido premiado con uno de los galardones más laureados de la NBA, el base de los Kings tiene un motivo similar para motivarse aún más: convertirse en el Jugador Decisivo del Año. 

Y no es baladí este reconocimiento ya que ganar este premio teniendo como competencia directa a estrellas de la talla de Jayson Tatum, Kevin Durant, Nikola Jokic, Luka Doncic, Giannis Antetokounmpo, Joel Embiid o los propios LeBron y Curry solo hace que encumbrar la figura de un Fox que, lejos de arrugarse en el momento más importante de la campaña, está justificando el por qué es un digno ganador de este galardón, habiendo anotado un total de 62 puntos en los dos primeros partidos de la serie ante los Warriors.