Ni Jaylen Brown ni Jayson Tatum: Luka Doncic descubre la traición que lo aleja del anillo de la NBA

Pese a que la NBA es una competición donde siempre hay que estar preparados para lo inesperado, la realidad es que imaginar a los Boston Celtics en las Finales no ha sido una sorpresa para absolutamente nadie. El equipo de los orgullosos verdes ha formado un núcleo sólido como el cemento que los ha convertido en la pesadilla de todo el Este y ahora lo están siendo para los Dallas Mavericks, que tras el primer partido, siguen tratando de descifrar la defensa de los de Joe Mazzulla.

En este sentido, si los de Massachusetts ya venían de ser un equipo extraordinariamente duro y complicado, la pasada temporada, la incorporación de un talento como Kristaps Porzingis no ha hecho más que complicar la vida a sus rivales, que además de tener que asumir la superioridad de la mejor dupla de la liga que forman Jaylen Brown y Jayson Tatum, se tienen que preocupar de un gigante de 2,21 capaz de tirar de tres con una eficiencia que asusta. Y es que el letón, se ha convertido en el factor x de unos Celtics que amenazan con quitar la emoción a estas Finales.

Alta traición que acabará con los Mavericks

A la espera de que se confirme en el segundo partido de las Finales, el cual se jugará el lunes a las 2:30 de la madrugada hora española. Los Mavericks han visto como el Big-3 formado por Tatum, Brown y Porzingis es demasiado para ellos. Y es que, no parece que ni con el mejor Luka Doncic -acabó con 30 puntos el Game 1- los de Dallas vayan a ser capaces de superar a sus rivales. En especial ahora que Porzingis, antiguo compañero de Doncic, ha recuperado su mejor forma física, siendo la pieza que acaba de decantar la balanza.

Y es que, con la traición del que fuera amigo del esloveno, todo es mucho más complicado para los Mavericks que, si quieren volver a sentirse con opciones, deben sacar una victoria de su segundo partido en el TD Garden, algo que tras el primer choque parece ciertamente complicado.