Mismo rumbo para Durant e Irving: fuera de Nets y Curry lo sufrirá

La situación parece irremediable en el equipo neoyorquino

Cómo han cambiado las cosas en los Brooklyn Nets respecto al verano pasado. El tridente que formó Joe Tsai, mandamás de la franquicia, con Kevin Durant, James Harden y Kyrie Irving parecía ser imposible de frenar sin ni siquiera haber debutado en la training-camp (pretemporada). Es cierto que las lesiones y los problemas extradeportivos jugaron una mala pasada a esta sociedad, que a lo largo del curso apenas pudo coincidir sobre la pista a su mejor nivel.

La salida de Harden a mediados de la campaña rumbo a Sixers supuso un varapalo tremendo para las aspiraciones del equipo neoyorkino, más aún si tenemos en cuenta que el hombre que llegó al equipo, Ben Simmons, ni quisiera ha podido debutar por no estar apto físicamente. Para más inri, los percances comenzaron a atormentar a Durant, que acusó en el momento menos indicado el exceso de protagonismo acumulado durante todo el curso. Como consecuencia, una debacle a las primeras de cambio en los play-off por el título.

Eso sí, dicha caída no ha sido la peor noticia del año para los Brooklyn Nets ya que en las últimas semanas tanto Irving como Durant están intensificando sus ganas de poner de poner tierra de por medio con el Barclays Center. Al parecer, su relación con Steve Nash no es la más gratificante para los intereses de la franquicia y, a sabiendas de que son dos hombres muy cotizados en el campeonato, no dudarán en aprovechar este tirón mediático para asestar el golpe definitivo al equipo. 

Eso sí, los efectos de esta doble fuga podrían ser mucho más preocupantes para los equipos que aspiran a ganar el Anillo en 2023, tales como los Golden State Warriors de Stephen Curry o Los Angeles Lakers de LeBron James, ya que, según hemos podio conocer en Don Balón, ambas estrellas, si finalmente se consuma su salida de los Nets, harán todo lo posible para seguir formando una dupla letal en cualquier de los equipos interesados en ellos.

Es cierto que, sobre el papel, esto se antoja tremendamente complicado dado el elevado salario qu reciben, pero la idea que tienen tanto Irving como Durant es seguir juntos la próxima temporada y, si la tensión no se diluye en Brooklyn, se ofrecerán a aquellas franquicias que no cuentan con jugadores de renombre, pero sí con ganas y dinero para poder protagonizar el gran bombazo del verano en la NBA.

Si esto finalmente se produce, aunque por el momento es solo la idea de ambos jugadores, Curry, LeBron, Tatum, Booker, Doncic, Jokic, Embiid y el resto de cracks que sueñan con el Anillo tendrán un motivo de máxima preocupación.