LeBron escoge su refuerzo, Curry sentencia a Klay y Green y Anteto y MVP Embiid, cerca del bombazo

Nada podía irle peor a Golden State Warriors en lo que va de temporada, que es el suficiente tiempo como para darse cuenta que la reconversión de este equipo esta temporada en algo parecido a una franquicia capaz de luchar por cosas importantes resulta casi imposible, y es por eso que, dado lo que le queda de carrera a Stephen Curry, poco menos que se ponga desde California en la picota a sus dos socios de dinastía. Por su parte, Lakers elije a su refuerzo y Antetokounmpo y el sorprendente Joel Embiid pelean por la gallina de los huevos de oro.

Más madera 

Se ha hecho viral la cara de sorpresa de Kevin Durant en rueda de prensa al escuchar la cifra anotadora del franco-camerunés de los Sixers, y no es para menos, Joel Embiid, el vigente MVP le endosó 70 puntos a Victor Wembenyama y los San Antonio Spurs, con lo que mantiene a su equipo luchando por lo más alto de la tabla junto al líder, Celtics, y al segundo en el Este, unos Milwaukee Bucks que ganaron a los Pistons. Y precisamente los de Pensilvania y los de Wisconsin son quienes pelean en estos momentos por hacerse con Dejounte Murray, la díscola estrella de unos Atlanta Hawks que quieren desprenderse del jugador.

En Los Ángeles, realismo 

El anotador del equipo de Georgia estuvo en su día relacionado con Lakers y Warriors, pero ya no parece estar en esa línea, ya que los primeros, el equipo de LeBron James, ha fijado su objetivo en el mercado en Bruce Brown, todo ello pendientes de saber qué harán con un D’Angello Russell que apunta a salir del Crypto.com. Así lo cree un Adrian Wojnarowski que sitúa al jugador de Toronto en el camino de los de púrpura y oro.

Por terminar donde empezamos, en La Bahia campa a sus anchas el caos, ya que nunca han estado tan hundidos en la tabla como esta temporada, algo nuevo para Steve Kerr, Curry y compañía y eso hace que la franquicia se replantee todo, lo que incluye dejar ir la temporada y atacar las salidas de Klay Thompson y Draymond Green al final de la misma. En cada rincón en el que se mira a Warriors sale la misma respuesta: los 36 años del base de Akron exigen un cambio profundo y un último intento de título, cosa que no sucederá con los actuales y viejos mimbres.