La desgracia azota a Joel Embiid: James Harden ahora tiene la ventaja

La temporada de los Philadelphia 76ers está siendo más que buena, y es que marchan líderes de la Conferencia Este y son uno de los claros candidatos a alzarse con el anillo. Ayer mismo sumaban una nueva victoria, 101 a 127 frente a Washington Wizards. Sin embargo, no todo fueron buenas noticas, pues la noche también dejó la lesión de su estrella, Joel Embiid. 

Las lesiones están minando las capacidades de los equipos más grandes del campeonato, y es que los Brooklyn Nets todavía desconocen la fecha exacta para el regreso de Durant, y a Anthony Davis todavía le quedan un par de semanas alejado de los Lakers. Pero los neoyorquinos parten con ventaja, y es que su fondo de armario de jugadores top es más amplio, y no se puede comparar que un equipo pierda a una estrella cuando todavía pueden salir al parqué James Harden, Kyrie Irving y Blake Griffin, mientras los Sixers han perdido al que apuntaba a MVP de la temporada. 

La jugada clave ocurrió en el tercer cuarto, cuando los visitantes marchaban 20 puntos por encima en el marcador. El camerunés se elevó hacia el aro para hacer un mate, con tan mala suerte de que el contacto con un rival entorpeció su caída y terminó apoyando todo el peso y doblando su rodilla izquierda de mala manera. Pésima noticia para un jugador siempre castigado por la lesiones pero que este año estaba pudiendo demostrar su potencial, y es que hasta la fecha promediaba más de 30 puntos por partido (y 11,6 rebotes). Hasta que tuvo que retirarse anotó un total de 23.

En cuanto a sus máximos competidores en el este, quieren aprovechar las dificultades que tendrá ahora el equipo de Philadelphia para asaltar la primera posición de su conferencia, y es que solo les separa una victoria, si bien es cierto que los de Harden tampoco han recibido buenas noticias. Kevin Durant, un mes después de su última aparición, todavía no sabe la fecha de su regreso. Su míster Steve Nash, ha afirmado que incluso en el mejor de los casos su vuelta no sería inmediata. La ventaja de los neoyorquinos en este caso es que tienen suficientes estrellas para permitirse poder seguir ganando a pesar de tener una ausencia de este calibre. Son precavidos e incluso podrían esperar al final de la temporada regular.