Kyrie Irving revela el secreto de su gran diferencia con LeBron James

Los Brooklyn Nets suman victorias mientras se alarga la espera por Durant

Cuando se anunció el fichaje de James Harden no todo eran cánticos de victoria en los Brooklyn Nets, y es que había gran parte de la afición que se mostraba algo escéptica con la incorporación. Lo cierto es que había miedo con cómo reaccionaría el vestuario juntando a tana estrella, muchos pensaban que sería una bomba de relojería que estallaría en el momento en el que algún ego alzase la voz por encima de algún otro, pero las cosas no están siendo así, para delicia de los del Barclays Center. 

El propio Kyrie Irving ha reconocido en una reciente entrevista que la clave de las ocho victorias seguidas que llevan en la NBA es gracias a que “aquí no hay un líder”. A pesar de haber ganado el anillo con Cleveland, se siente mejor este año que en ninguna otra temporada, incluyendo también su paso por los Celtics. 

Recalca la importancia de ejercer ese papel de líder, afirmando a la vez su responsabilidad directa tanto en los éxitos como en los fracasos de sus anteriores experiencias, que afirma que le han hecho crecer y aceptar la posición que tiene ahora, que no es la de “protagonista principal”. Sabe que su papel de este año no es ser el “héroe que todos quieren”, sino que es una responsabilidad compartida, y espera poder “dar un mejor ejemplo”. 

A pesar de no contar con Kevin Durant, ausente en los últimos seis partidos por una distensión muscular que recientemente se ha conocido que le dejará fuera al menos por otros tres encuentros más, tanto Irving como La Barba han podido tirar entre ellos del carro para conseguir una racha demoledora que les empatan con el líder de la Conferencia Este, Philadelphia. 

Los de Steve Nash pueden ir a por el anillo aun faltando alguna estrella, algo que es el principal defecto de los Lakers de LeBron, que están sufriendo de los lindo sin Anthony Davis. Han demostrado que tienen actitud y compromiso en la cancha y fuera de ella. Ese secreto que es la buena compenetración entre el Big Three, que les hace poder liderar al equipo sin necesidad de depender de todos ellos en el parqué, hace que sean un rival temible. Su próximo enfrentamiento, los Dallas Mavericks de Luka Doncic, servirán como nueva prueba del estado de forma de un equipo que está cumpliendo las gigantescas expectativas que había sobre ellos al comienzo de la temporada.