James Harden I, reina: golpe decisivo a Stephen Curry y LeBron James

Las lesiones y el gran momento de la Barba elevan sus posibilidades a llevarse todo

Empieza a ser un guion recurrente el relato de una victoria de Brooklyn Nets: ganan siempre y cuando esté uno de los tres integrantes del Big Three, uno que normalmente está siendo James Harden y que ya no pocas voces le empiezan a colocar el cartel de MVP de la temporada. Otros que son candidatos, concretamente cuatro, como Stephen Curry, Joel Embiid, Giannis Antetokounmpo y LeBron James están lesionados.

Si tenemos que hablar de lo estrictamente deportivo, los Nets volvieron a llevarse la victoria (112-116) esta vez solo con James Harden sobre el parqué de ese trío de oro (Kevin Durant y Kyrie Irving lo completan) que poseen y ante unos Portland Trail Blazers en plenitud de efectivos. Los de Nueva York han cogido velocidad de crucero e inercia campeona y les sale todo. Y eso que comenzaron perdiendo el primer cuarto (41-37), pero Harden volvió a dirigir al equipo (25 puntos, 17 asistencias y 7 rebotes) hasta otra victoria más que les mantiene en la persecución (30V14D) de unos 76ers (31V13D) que también ganaron, esta vez a Golden State Warriors (98-109).

Pero más allá de este triunfo neoyorkino o la caída de los de San Francisco y Los Angeles Lakers, Harden está sentando las bases de una franquicia que aspira al título más que nadie. Y no solo eso, en lo personal Harden se consolida como uno de los grandes de la liga mientras pierden ventaja en la lucha por el MVP jugadores como Stephen Curry, Joel Embiid, Giannis Antetokounmpo y LeBron James, todos ellos, como decimos, lesionados.

Incluso Kevin Durant, compañero de equipo de La Barba, deja sitio a este monstruo que es un devorador de récords y, centrado, una pieza infalible e imparable. Por todo ello hay quien ve a Harden en el mejor momento de su carrera, dispuesto a quitarle el trono de la liga a los de púrpura y oro de El Rey y desbancar en la pelea por ser el jugador más valioso del campeonato al resto de favoritos. Arranca el tramo final y ningún argumento convence más ahora mismo que el del ex de Houston Rockets.