Esperpento de los Warriors que ni Curry y Ja Morant evitan: Doncic sonríe y Durant lo cambia todo

Hace una semana atrás parecía que el regreso de Stephen Curry a escena tras casi un mes en el dique seco sería la solución perfecta de los Golden State Warriors para revertir la adversa dinámica vivida por la franquicia dirigida por Steve Kerr en este 2023, pero la dolorosa derrota sufrida en Memphis puso en evidencia las múltiples carencias del equipo.

A pesar de que Curry fue el máximo anotador del encuentro con 29 puntos y de que Ja Morant, con sus problemas extradeportivos, ha generado un sentimiento de inestabilidad en los Grizzlies, los Warriors cosecharon una dolorosa derrota que no solo complica la presencia del equipo en el play-off que da derecho a pelear por el título de la NBA, sino que brinda el último ingrediente a una cadena de estropicios que justifican la esperpéntica temporada que están viviendo los del Chase Center.

Con eso y más, en la misma Conferencia Oeste se han producido en las últimas horas otras dos noticias que cambian por completo el orden establecido y que podrían tener su máxima repercusión en las eliminatorias que comenzarán conforme finalice la fase regular.

Mirando a Dallas, la franquicia tejana se encontraba en vilo ya que Luka Doncic sufrió un pinchazo en el muslo izquierdo en el último encuentro disputado por los Mavs ante los Pelicans que sembró el pánico en la franquicia dirigida por Jason Kidd a tenor de la importancia que tiene el base esloveno en el proyecto. Una lesión de gravedad, sin margen para mover ficha, supondría despedirse de las opciones de luchar por el anillo esta temporada, pero los últimos exámenes médicos realizados a Doncic han regalado la mejor noticia posible: no hay consecuencias que lamentar y estará a disposición de su entrenador en los próximos encuentros.

No obstante, en el otro lado de la balanza está un Kevin Durant que sí ha visto como su torcedura de tobillo mientras realizaba sus ejercicios de calentamiento previos al partido ante los Houston Rockets es tan grave como se presuponía.

Tras ser el bombazo de las últimas horas del mercado cambiando Brooklyn por Phoenix, Durant aún no ha tenido la oportunidad de debutar ante su afición por culpa de sus problemas físicos, aunque sí lo ha hecho con el equipo, y el percance mencionado le tendrá apartado de las pistas durante casi un mes, tiempo de sobra para que los Suns vuelvan a vivir una dinámica negativa en la que desciendan puestos en el Oeste de forma vertiginosa.